El Gatito hotelero.
El feliz gatito sin dueño, una noche caminaba en lo oscurito de un hotel y empezó a entrar en cada habitación. En una habitación hay una mujer sentada cenando un pescadito y el gatito educadito con un maullidito le pido un poquitito. La mujer con mucho gustito, le da un poco de pescadito, que el gatito recibió con un ronroneo y maullidito animadito. El gatito terminando el pescadito le da como agradecimiento una lamida en la mano a la mujer y está se ríe tantito. La mujer viendo que el gatito no tiene dueño, decide mandarle una foto del gatito a su marido por mensaje y le comunica por teléfono que va a llevárse al gatito. El gatito dándose cuenta de la conversación, larga un maullidito contentito y sus pupilas se dilatan tantito.